miércoles, 27 de febrero de 2013

novela de one direction y tu


capitulo 1 


La vida te da sorpresas


Y aquí estoy yo, como siempre, aburrida, pasando una tarde más de mi vida, un día más sin importancia. Aunque no era un día cualquiera...Mi banda favorita, los One Direction, iban a dar un concierto dentro de un mes y medio y yo estaba intentando por todos los medios, convencer a mis padres para comprar una entrada y poder asistir. Pero ellos siempre se negaban, ya o bien porque el día que hacían el concierto caía en día de instituto, o bien porque no había dinero para la entrada. Yo tenía planeado ir con mis dos mejores amigas, Cece y Meghan, las cuales estaban igual de obsesionadas con la banda que yo. Pero sus padres, al igual que los míos, se negaban...


En fin... yo lo daba todo por perdido. Me vestí y decidí tomar un poco de aire fresco, ya que no tenía nada que hacer. Salí a la calle y noté una brisa suave que hizo que mi piel se erizara. Empecé a caminar sin rumbo alguno. Era un día normal, soleado, aunque notaba algo diferente.

Me encontraba en mitad de la gran ciudad de Nueva York, en la gran avenida donde hay un montón de tiendas para comprar ropa y accesorios y gran cantidad de restaurantes. La avenida estaba llena de carteles digitales que anunciaban próximas películas y promocionaban establecimientos de todo tipo.
Las carreteras estaban inundadas de coches y taxis. ¡Estaban por todas partes!











Decidí ir a mi cafetería favorita. Ahí estaba Madison, la dependienta, una chica muy maja y en la que poder confiar.


¿Qué te sirvo ________?

Un capuccino, por favor.

Muy bien, ¿qué te trae por aquí?

- Pues la verdad...-. Dije con un tono despreocupado – No me apetecía hacer otra cosa, además, los cafés que sirves están deliciosos.

Gracias,-. Dijo agradecida.


Decidí levantarme de la silla de la barra donde me había sentado y sentarme en una mesa. Pensé que merendar algo allí no estaría mal.
Comencé a caminar hacia la mesa a la que estaba decidida a sentarme, pero divisé a un chico rubio sentado en la mesa de al lado, que me robó la atención. Me resultaba familiar pero no podía verle bien porque no estaba lo suficientemente cerca. 





Mmm...-. Me dije a mí misma.


A medida que me iba acercando, veía como ese chico comía con ansia una tortita. Por mucho que me estuviera fijando en él, no conseguía verle claramente a la cara. Parecía que se estaba ocultando con su mano para que nadie le viera. Parecía un poco tímido, de mi edad o por el estilo. Estaba a unos pocos metros y comencé a ponerme nerviosa...
Seguí caminando y finalmente destapó su cara. Mis ojos se abrieron como ninguna vez lo habían hecho. El aire ya no entraba en mis pulmones.


¡OH, DIOS! ¡NO ME LO PUEDO CREER! -. Me dije a mí misma. -¡ES NI... NIALL HORAN!



No hay comentarios:

Publicar un comentario